A fines de 2019 una nueva enfermedad la COVID-19, va tomando fuerza en China, extendiéndose poco a poco a otros países. En marzo de 2020 la Organización Mundial de la Salud define el brote producido por esta infección de COVID-19 como una pandemia ya que se extendió a nivel mundial causante de gran número de casos confirmados y muchos otros fallecidos. En el Perú, se han confirmado hasta la fecha 4 150,832 casos positivos y 216,877 fallecidos.
Esta situación de desconocimiento para su prevención y manejo hizo que muchos países buscaran alternativas de control hacia esta enfermedad, como el distanciamiento social, cuarentena, el cierre de las instituciones educativas con la finalidad de tener tiempo para conocer más al virus y su comportamiento, Lo que puso en marcha innumerables estudios a fin de generar mayor evidencia y encontrar alternativas de control y manejo de esta enfermedad.
El aumento del número de casos y sobre todo las complicaciones ocasionadas hizo que nuestro sistema de salud colapsara. Dejando de lado muchas otras enfermedades y atendiendo sobre todo a la población de la tercera edad que resultaban siendo los más afectados.
El estudio realizado en el servicio de emergencia pediátrica de un hospital de Lima observó que durante el 2020 hubo una disminución del número de pacientes pediátricos atendidos, de los cuales el mayor número correspondía a otros distritos diferentes de Lima Metropolitana y la gran mayoría eran pacientes nuevos encontrándose un número mayor para el diagnóstico de enfermedades infecciosas y parasitarias, así como por traumatismo, envenenamiento y otras consecuencias externas y un número menor correspondía a infecciones respiratorias. Esto último podría ser explicado por el aislamiento social y el uso de mascarilla en forma obligatoria, lo que en cierta manera protegió contra estas infecciones.
La cuarentena aplicada en nuestro país podría explicar la disminución del número de pacientes pediátricos que acudieron a emergencia por el temor al riesgo de contagio por la COVID-19, porque los profesionales de salud sólo alcanzaban atender a este tipo de pacientes, los padres lograban atender a sus niños y sólo en casos muy urgentes acudían al hospital.
Estos resultados son similares a los encontrados en otras investigaciones realizados en otros países. Se recomienda la necesidad de realizar mayores estudios para averiguar los factores que podrían dar mayor explicación a los resultados hallados.
Cambios comparativos en la asistencia de pacientes al servicio de emergencia durante la primera ola en el Hospital de Emergencias Pediátricas entre el 2019 y 2020. Disponible en: https://rpmesp.ins.gob.pe/index.php/rpmesp/article/view/11245/5111
