Alimentos ultra procesados y procesados continúan ofreciéndose al interior y exterior de colegios de Lima Metropolitana

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Estudio realizado por investigadores de la Universidad Peruana Cayetano Heredia confirman que a pesar de las políticas para promocionar la alimentación saludable en las instituciones educativas básicas, aún se ofrecen alimentos que contribuyen al sobrepeso y obesidad.

El Perú cuenta con la Ley de Promoción de Alimentación Saludable para niños, niñas y adolescentes; además el Ministerio de Salud ha publicado en 2019 los «Lineamientos para la promoción y protección de la alimentación saludable en las instituciones educativas básicas. Sin embargo, ¿realmente se cumplen las disposiciones? Un estudio científico intenta responder dicha pregunta.

Para entender los resultados de este estudio, debemos conocer antes qué son los alimentos ultraprocesados. Según la Organización Panamericana de la Salud (OPS), los alimentos ultraprocesados son preparaciones industriales elaboradas a partir de componentes de alimentos, además tienen sustancias que imitan o aumentan sabores, olores, colores de los alimentos o comidas de los cuales son preparados estos productos. La industria desarrolló este tipo de alimentos, ante la necesidad de contar con alimentos que estén listos para comer, beber o calentar.

Los alimentos y bebidas ultraprocesados más conocidos son los siguientes: bebidas gaseosas, snacks dulces y salados, barras energéticas, helados, galletas, bebidas energéticas, concentrados de jugos, jugos endulzados, comidas listas para calentar, sopas instantáneas, salsas y aderezos, entre otros.

Otros tipos de alimentos son los procesados, estos se elaboran al agregar grasas, aceites, azúcares, sal y otros ingredientes a los alimentos mínimamente procesados, con la finalidad de hacerlos más duraderos y sabrosos. En este grupo se consideran panes, pescados y carnes salados y curados, leguminosas y verduras en conserva.

Se sabe que el consumo excesivo de alimentos ultraprocesados puede generar el incremento de grasas o lípidos en la sangre de los niños, y con ello aumentar el riesgo de enfermedades del corazón y las arterias; así como de obesidad y un conjunto de alteraciones conocidas como el síndrome metabólico.

¿Qué es el Servicio Rural Urbano Marginal de Salud?

Es un conjunto de factores de riesgo para enfermedad del corazón, diabetes y otros problemas de salud. Si una persona tiene tres o más de los siguientes criterios, se considera que tiene esta condición. Los criterios son la obesidad abdominal, elevados niveles de una grasa llamada triglicérido en sangre, bajos niveles del colesterol bueno —llamado HDL—, elevada presión arterial y niveles elevados de azúcar en sangre.

¿En qué consistió el estudio?

El estudio fue realizado por investigadores de la Universidad Peruana Cayetano Heredia, quienes seleccionaron 15 colegios entre públicos y privados, ubicados en 10 distritos de Lima Metropolitana. Entre noviembre y diciembre del 2019, los investigadores observaron que tipo de alimentos se ofrecían en los quioscos y cafeterías escolares; y en los puestos de vendedores ambulantes ubicados frente a dichos colegios. Además, ellos verificaron la presencia de octágonos en los alimentos, y el uso de publicidad de los alimentos procesados y ultraprocesados.

Todos los colegios tenían un quiosco o cafetería, en dos colegios no se observaron vendedores ambulantes en las cercanías. Todos los colegios ofrecían alimentos ultraprocesados en sus quioscos; los vendedores ambulantes también los vendían.

Los alimentos ultraprocesados más frecuentemente observados en los quioscos fueron las galletas y bizcochos, caramelos y golosinas, bebidas envasadas y cereales endulzados. Los ambulantes ofrecen en mayor frecuencia galletas y bizcochos, cereales endulzados, snacks y caramelos y golosinas.

En 8 de los 15 colegios, cinco públicos y tres privados, se vio publicidad en las congeladoras o estantes donde se almacenan los alimentos; y en dos colegios públicos había afiches publicitarios.

Los alimentos procesados fueron mayoritariamente ofrecidos en los quioscos escolares, principalmente sándwiches, snacks derivados de cereales, platos de entrada y principales, y agua, refrescos y jugos. En los vendedores ambulantes, la oferta de los alimentos procesados fue menos frecuente.

La oferta de alimentos naturales como frutas y verduras se observó en 14 de 15 quioscos escolares;  por otro lado, la disponibilidad de estos alimentos, solo se observó en vendedores ambulantes de 4 de 13 colegios.

Los autores brindan algunas recomendaciones que podrían mejorar esta realidad, entre ellas difundir la regulación existente en los colegios públicos y privados; fortalecer la inspección del cumplimiento de la regulación; y mejorar la fiscalización a nivel distrital de la venta ambulante alrededor de los colegios.

El artículo se encuentra disponible en: https://doi.org/10.17843/rpmesp.2020.374.5838

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